Se acerca el verano, el solcito nos llama a estar afuera, disfrutando de los días cada vez más largos y la promesa de las vacaciones.
Como anticipo,les proponemos asomarnos a la playa y al mar. Para soñar aventuras y encuentros inesperados aquí van unos textos que los van a salpicar de agua salada, espuma y caracoles.
Los cuatro mares
El mar dulce El mar rojo
Tiende la mesa a la hora del té. Juega a la batalla y siempre pierde.
cursogabon10.wordpress.com |
El mar negro El mar salado
Enjuaga las horas de la noche. Abraza a las ballenas con su canto.
Poemas de alta mar
Canela -Cecilia Afonso Esteves
Makarena era la ballena de peor carácter de Península Valdés. Se enojaba si llovía, y también si no llovía. Protestaba si veía pasar un barco cerca y también si pasaba lejos. Pero lo que más rabia le daba eran los humanos. No soportaba verlos nadar con tanta torpeza, y menos toleraba sus gritos o sus juegos en la playa.
Cecilia y su hermanita jamás habían visto una ballena, pero eso no era un problema: en la playa había un enorme tronco hundido en la arena y decidieron que se trataba de una ballena. No una ballena cualquiera, sino una ballena furiosa que atacaba las ciudades y se comía a los niños. Menos mal que Cecilia y su hermanita defendían la humanidad de la ballena asesina.
La sonrisa de la ballena
Ricardo Mariño – Javier González Burgos
Penas de amor y de mar
A esa hora las chicharras hacían que el algarrobo fuera una sola música, y casi no se sabía si eso era un árbol o una canción.
Las sandías ya habían madurado, las algarrobas eran una miel y los yuchanes tenían tantas flores que el picaflor se mareaba sin saber cuál elegir.
d727e6_animated+gifs+insects+106.gif |
-¿Y ahora para qué cantan? -le preguntó el sapo a una chicharra con cara de estar muy contenta-. Ustedes cantando ya hicieron madurar las sandías; también hicieron madurar las algarrobas, y encima florecer a los yuchanes… ¿Para qué cantan ahora?
-Para saber cómo es el mar –dijo otra chicharra-, y usted nos viene justito, don sapo. ¿Conoce el mar?
El sapo dio un paso atrás, puso una cara un poco rara, y con un tono más raro todavía dijo:
-Como conocer, lo conozco; pero ni vale la pena hablar del mar.
-Mire que dicen que es muy grande… -dijo la chicharra con cara de estar contenta.
-Grande sí, y no va a ser este sapo el que lo niegue… pero ser grande no sirve para nada. Un asco de grande
-¿Es cierto que es más grande que este río?
-Bah, ni siquiera corre para ningún lado. Está siempre quieto en el mismo lugar, déle hacer olas. Es lo único que sabe hacer. ¿Qué tiene de lindo hacer olas todo el día? ¿Eh? ¿Me quieren decir qué tiene de lindo?
Gustavo Roldán - Raúl Fortín
El gato de arena
Hay un gato que es tan verdadero como los demás e igual a ellos en todo –es decir, zarpas, dientes, bigotes, rabo, la manera de andar, lamerse y desperezarse-, la única diferencia es la sustancia con que está hecho. Rara, tratándose de un gato.
Se lo puede ver solamente en el lugar donde nace: la orilla del mar.
Al gato lo hacen las personas, los chicos por lo general, mientras construyen castillos en la playa. Lo hacen sin proponérselo. Ellos cavan, apilan, humedecen, amasan y moldean la materia espesa de la arena, siempre pensando en sus castillos, hasta que sin darse cuenta le han dado forma a las distintas partes que componen el gato. No lo notan todavía, pero el gato ya existe.
fondosya.com |
Va y viene, sedoso, de una punta a otra de la playa, entre el espigón y las rocas, con la calma natural de los gatos.
Libro de los prodigios
Ema Wolf - Matías Trillo
Y como siempre, para seguir disfrutando..., estos libros te están esperando en la biblio:
BOMBONES SURTIDOS
"Sopa de sueño y otras recetas de cocina."
José Antonio Ramírez Lozano- Riki Blanco
Kalandraka
Imakinarium.net |
"Un hombre con sombrero."
Gustavo Roldán (h)
Pequeño editor
"Diciembre, súper álbum."
Liliana Bodoc -Luis Scafati
Alfaguara Juvenil
Hermosa la selección de poemas. En cualquier momento tomo coraje y ecribo algo a compás de las olas.
ResponderEliminarc.